Si bien parecen inofensivas a simple vista, las cocinas industriales cumplen con todas las condiciones para causar problemas de seguridad, como quemaduras, cortaduras e incendios. Controlar los últimos es muy importante, ya que son el riesgo más devastador. Deben aplicarse medidas tanto pasivas como activas, por ejemplo, la instalación de un tambo arenero contra incendio.
Fuegos clase K
Son varias las clases de fuego que existen y cada una requiere medidas de extinción específicas. Entre ellas, destaca la clase K. Es importante que conozcan esta clase de fuego y sus características inflamables específicas, ya que son los más comunes en cocinas industriales. La letra «K» de esta clase se deriva de kitchen, es decir, cocina en inglés.
Según expertos, el 80% de los incendios en restaurantes y fábricas de preparación de alimentos inician en las cocinas y el 60% son del tipo K, ya que en ellas son comunes algunos productos inflamables, como grasas animales o vegetales y aceites. Estos fuegos son difíciles de extinguir y reaccionan de forma violenta si tienen contacto con agua, por lo que deben usarse equipos agentes extintores específicos.
En las cocinas industriales, son varios los focos de riesgo donde se usan distintos tipos de aceites y grasas, como parrillas, freidoras comerciales, hornos, sartenes, entre otros. No siempre es posible mantener un control absoluto de las condiciones o el comportamiento del personal, por lo que es necesario integrar sistemas contra incendios enfocados en esta clase de fuego. Para ellas, se recomiendan varios tipos de extintores, no obstante, cada vez más propietarios optan por los tambos de arena, por su excelente capacidad de sofocamiento.
Características del tambo arenero
El tambo arenero contra incendio se indica para fuegos clase A, B, C y K, por lo que son excelentes para cocinas industriales. Son una buena opción para materiales combustibles que pueden reaccionar con el agua y empeorar la situación e, incluso, causar explosiones. La arena es la mejor opción, ya que brinda una capa de material que cubre tanto el fuego como el material combustible. De esta manera, interrumpe el suministro de oxígeno y extingue las llamas.
A diferencia de otros agentes extintores, como agua, CO2 o espuma, la arena no presenta reacciones químicas con el fuego, debido a que es un material inerte. Esto es conveniente para evitar contaminaciones en un espacio donde la inocuidad alimentaria es crucial, como la cocina. La arena, que pueden encontrar en nuestra tienda de extintores en CDMX, es depositada en tambos o cubos de gran capacidad.
Junto al tambo se integra una pala para arrojar la arena en la zona donde el fuego se originó o donde se expande. Esta herramienta es crucial, ya que los tambos son muy pesados y sería difícil depositar adecuadamente la arena sin ella. Los tambos son de alta resistencia, se fabrican con materiales duraderos y capaces de resistir ante temperaturas elevadas. También se abren fácilmente para tratar cualquier emergencia, además para que la pala esté siempre disponible, tiene una base que la une al tambo.
No existe un estándar en el tipo de pala, aunque se recomiendan las que tienen punta cuadrada y una agarradera en forma de D, ya que facilita el manejo de la arena. El material con el que suelen fabricarse los tambos es lámina de acero, que se recubre con pintura horneada. Esto les vuelve resistentes ante distintas condiciones. Tienen que ser llamativos, por lo que suelen pintarse de color rojo y amarillo. Al instalarlos, se recomienda señalizarlos para facilitar su ubicación.
Con respecto a la cantidad de arena contenida en el tambo arenero contra incendio, esta depende de las dimensiones de las cocinas. Existen ejemplares con 50 kg de arena y otros con 150 kg. Cabe mencionar que deben ubicarse en zonas cercanas y que sean de fácil acceso, además debe capacitarse al personal para que sepa cómo usar el sistema adecuadamente.
Medidas adicionales
Además de adquirir un tambo arenero, recomendamos las siguientes medidas:
- Señalan al personal los peligros de incendio en las cocinas industriales y motívenlos para que realicen sus actividades y eviten situaciones de riesgo.
- Cualquier fuego activo debe vigilarse bien y debe haber al menos una persona a cargo de él.
- La grasa de todos los equipos electrónicos debe limpiarse, ya que es foco de fuegos.
- Las corrientes de aire pueden ser peligrosas durante las cocciones, por lo que deben vigilarse.
- Proporcionen a su personal ropa con mangas cortas o ajustadas.
- Eviten que cualquier trabajador cocine bajo los estados del alcohol u otras sustancias.
- Por ningún motivo deben guardarse los productos inflamables en la cocina.
- Sean cuidadosos con los cables de extensión y recuerden que deben usarse solo temporalmente.
- El calentamiento de los electrodomésticos debe estar bajo control. En caso de que alguno emite más calor de lo normal, debe revisarse por un profesional.
Si necesitan tambos areneros de calidad con una empresa reconocida en la venta y mantenimiento a sistemas contra incendio en CDMX, contacten a los expertos de ATP. Marquen al (55) 5272 4181.
