Las consecuencias de los incendios pueden ser devastadoras para las industrias, tal y como se ha atestiguado en las últimas décadas en nuestro país. Basta con buscar casos de incendios industriales en Google para encontrar muchas páginas con información sobre fábricas y centros comerciales que fueron afectados por las llamas. Muchos de esos incendios han ocurrido por líquidos inflamables y riesgos eléctricos, por lo que es importante mantenerlos a raya con algunas medidas preventivas. Les diremos a continuación algunas para que las apliquen e implementen en un programa preventivo. Recuerden respaldarse en fabricantes de extintores en CDMX para instalar también un sistema contra incendios adecuado a los fuegos eléctricos y por líquidos inflamables.
Medidas para minimizar riesgos eléctricos
La electricidad es necesaria para que las industrias realicen sus actividades, sin embargo, también son una de las causas comunes de incendios. Generalmente se producen por equipos sobrecargados, defectuosos, sin mantenimiento, inadecuados para las aplicaciones, con mala ventilación e insuficiente aislación o próximos a combustibles que pueden facilitar la ignición y propagación de las llamas.
La creación de un programa que incluya los extintores adecuados para apagar incendios eléctricos es necesaria para:
- Eliminar de inmediato las fallas que puedan causar un incendio.
- Identificar problemas potenciales en los sistemas y aparatos eléctricos.
El programa que puede planearse con ayuda de fabricantes de extintores en CDMX necesita un enfoque coherente y bien organizado para identificar fallas, capacitar al personal, conocer el estado de las instalaciones eléctricas y asegurar el mantenimiento de equipos. Recomendamos implementar en él las siguientes medidas:
- Identificación de defectos. Es indispensable diseñar un programa para verificar periódicamente los equipos eléctricos e instalaciones, que deben cumplir con las normativas vigentes. Un método efectivo para detectar tempranamente defectos como sobrecargas o malas conexiones son las inspecciones termográficas una vez al año.
- Mantenimiento de equipos. Es importante que los equipos eléctricos y sus protecciones se encuentren en óptimas condiciones operativas. Asegúrense de que estén secos y en una temperatura adecuada, además que haya ventilación suficiente. Deben incorporar en el programa las sugerencias de los fabricantes de los equipos y definir un procedimiento para dar seguimiento formal a las tareas correctivas. Si encuentran defectos corríjanlos de inmediato.
- Verificación de la adecuación de los equipos a su fin. Corroboren que los equipos e instalaciones sean adecuados para su entorno y presten atención a aquellas zonas con peligros como gases inflamables, vapores, polvo combustible, etcétera. Verifiquen al concluir una modificación en la instalación industrial que los sistemas eléctricos sean adecuados para el nivel de potencia requerido. Prueben los dispositivos protectores con regularidad y conforme a las recomendaciones de los fabricantes en cuanto a frecuencia y método, además, revisen que haya protecciones con disyuntores diferenciales para disminuir los riesgos y cumplir con las normativas.
- Capacitación. Los empleados deben aprender a detectar defectos y comprender los riesgos de las instalaciones eléctricas. La capacitación les permitirá cumplir con los métodos de desconexión segura de los aparatos en caso de peligro y conocer las medidas de acción en caso de incendios.
- Deben asegurar una distancia adecuada entre combustibles y equipos eléctricos o colocar entre ellos una barrera ignífuga. Revisen que las salas eléctricas estén libres de combustibles y eviten utilizar cableados provisorios y que el personal cumpla con esta sugerencia. Protejan, por último, las zonas de almacenamiento de las lámparas halógenas o de mercurio con más de 400 V para que no caigan pedazos incandescentes en los materiales combustibles.
- Agentes extintores. Es importante utilizar equipos de extinción adecuados a los fuegos eléctricos. Uno de ellos es el polvo químico y seco, que interrumpe casi de inmediato la reacción química de las llamas. Es el más utilizado actualmente y su liberación se da mediante una manguera con un orificio. Puede usarse también para incendio en combustibles sólidos. Deben saber que es tóxico para las personas y puede dañar los circuiros eléctricos, por lo que es preferible el agente ABC de gas HCFC 123.
Otro agente recomendado es el basado en productos halogenados. Actúan como el polvo seco, además, poseen agentes limpios, por lo que se recomienda en centros de datos y salas con equipos electrónicos sofisticados.
Medidas para minimizar riesgos por líquidos inflamables
El uso de líquidos inflamables es frecuente en actividades industriales. Se trata de líquidos que a temperatura ambiental (18 °C) o menos liberan vapores con potencial de incendio y explosión. Son muy peligrosos debido a la facilidad con que prenden los vapores al tener contacto con fuentes de ignición y la velocidad con que propagan las llamas.
Los vapores pueden formar con el aire una mezcla explosiva bajo límites de concentración específicos. La implementación de medidas que contengan los líquidos y vapores y disminuyan la fuente de ignición es necesaria para prevenir los incendios Clase B. El programa de prevención para este caso debe incluir las siguientes medidas:
- Ventilación. Las fábricas o centros comerciales donde se usan o almacenan líquidos inflamables deben tener buena ventilación, tanto mecánica como natural, para que los vapores inflamables no se acumulen.
- Equipos de seguridad. Es necesario usar elementos como cestos de metal con tapa para guardar los trapos que tengan residuos de líquido inflamable, recipientes de seguridad o safety cans, conexiones a tierra en tambores, válvulas de cierre automático para operaciones de transvase, etcétera.
- Límites de almacenamiento. Deben establecerse límites en las cantidades usadas de líquido inflamable para efectuar las tareas cotidianas dentro de fábricas o talleres.
- Zonas de almacenamiento. Es importante diseñar áreas para guardar los líquidos inflamables con el fin de contener derrames notables, además, deben incluir muros cortafuego, fosas de retención, puertas con diques de contención, techos volubles, etcétera. Prohíban que el personal fume en esas zonas.
- Equipos eléctricos. Los sitios donde se almacenan o usan líquidos inflamables deben tener equipos eléctricos adecuados como puesta a tierra de las instalaciones, motores e iluminación a prueba de explosión, autoelevadores adecuados para zonas con peligro de entornos inflamables, entre otros.
- Extintores en CDMX. Es importante el uso de agentes para fuegos Clase B. El más conveniente es el polvo seco. Son útiles también para fuegos eléctricos y cuenta con diversos químicos que actúan como agentes entre los que se encuentran bicarbonato potásico, bicarbonato sódico, cloruro potásico, fosfato monoamónico y bicarbonato de urea/potasio. Se utiliza también el polvo polivalente, que es ideal para fuegos complejos, es decir, donde se mezclan las clases A, B y c y la espuma física como el agente AFFF.
Si desean el respaldo de fabricantes de extintores en CDMX para diseñar un programa de prevención efectivo contra fuegos industriales de clase B y C contáctennos a través de la línea (55) 5272 4181 o completen el formulario en nuestro sitio web.